Por ti deseé que las horas sean eternas, por ti soñé un mundo nuestro, sólo nuestro. Por ti descubrí la verdadera felicidad y los verdaderos motivos de depresión, imaginé una vida sólo de a dos. Por ti sentí que ya no tocaba el suelo que pisaba, por ti toqué las nubes con la punta de mis dedos. Por ti encontré una adicción, no en el alcohol, no en la droga, no en el cigarrillo; encontré una adicción en tus besos, en tus manos, en tu piel. Por ti encontré la necesidad de alguien más, esa sensación de vacío al separarnos, de sentirme llena en los encuentros. Por ti le temo al tiempo, al mañana, a la idea de que las cosas puedan cambiar. Por ti logré cosas que no me habría creído capaz de hacer, por ti haría más de lo que puedo explicar. Por ti doy mi vida, entrego todo lo que tengo. Para ti tengo todo mi amor, y todo el espacio de mi ser para llenar con el tuyo. Para ti inventaría un mundo, bajaría todas y cada una de las estrellas del cielo, sólo para ti.